Me gustan los libros que no tienen fin. Esos que empiezas a leerlos y al terminar todo queda abierto. Un final que no es un final como nos enseñaron de pequeños. Nada de colorín colorado este cuento se ha acabado. Este cuento solo se acaba de una manera, y para eso hay que morirse. Cosa que no pienso hacer. Libros como 'El guardián entre el centeno', por ejemplo. Nada de finales felices, comieron perdices.. y parece que el resultado de esa suma fuera inamovible.Esos finales no me resultan creíbles.
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