Ya sé que volver no es fácil. Me lo dicen tus ojos. Pareces cansado. Sé que a veces volver da flojera. A mí también me da pereza siempre al principio, y pienso: jo, qué necesidad tengo yo de meterme en esto…
A veces me dan ganas de parar. De no hacer nada. Decir basta. Al cuerno con todo. Me bajo. No juego más. Ya está bien para una vida.
Pero me conozco, y sé que una semana sin hacer, me desquiciaría. Por eso prefiero hacer. Al final lo único que nos mantiene en movimiento es precisamente eso, el movimiento. La inercia.
A veces lo más sencillo y lo que más daño hace es continuar. Seguir para adelante sin saber adónde vas. La inercia es la que nos hace seguir pero, ¿a dónde?. Volver a empezar es complicado es más fácil seguir.
ResponderEliminarLa inercia nos hace seguir, pero no nos dice hacia dónde. Eso lo elegimos nosotros.
ResponderEliminarY seguir no es tan facil. A veces, cuando no estás bien, te es imposible seguir, y tienes que parar. O dar marcha atrás, porque seguir sin hacerse daño es imposible.
Gracias por comentar.